Miseria es otra cosa



El señor F. "El Caruso Lombardi de la vida académica"





Apósito*: Loas a Bigud. "homenagio" descarado al mismo.

El burdo chupamedismo que el señor Bigud (el Gandul nº 1 desde la derecha, encargado ad hoc de asuntos legales e ilegales, nº 5 en la línea de sucesión, detrás de otro gandul, del encargado de limpieza, de la secretaria privada del Jefe, del Elemento Sorpresa y del dispenser de agua) le prodigó recientemente a Nuestro Amado Líder tuvieron sus frutos, y, en virtud de ellos, el nunca del todo bien ponderado señor Bigud ha sido galardronado con el "Gandul del Mes" de Julio de 2011 (O, como se conoce en el nuevo calendario del MIB, el mes 2 del año 45 de la Era Bugmaniana.

Bigud, hombre recto e intachable, obtuvo la mención en reconocimiento a "su notorio compromiso con la obsecuencia más elevada, su devoción hacia Mi persona rayana a la zalamería, el Salame picado fino que me compró en Tandil camino de vuelta de ver un partido de Football en Bahía Blanca y su compromiso con la burocratización de los demás gandules" (Decreto XII/45 del Amado Líder).

Aplausos, aplausos.

Se preguntarán por qué estoy escribiendo esto. A decir verdad, yo también.

Ocurre que, temeroso de que este reconocimiento al señor Yoni pudiera causar resentimiento y agitación en el resto de los gandules (¡qué bien nos conoce!) el Líder decidió otorgarnos a los demás ciertos títulos y privilegios, para "calmar a la chusma", y "a ver si se civilizan de una vez, hatajo de pelafustanes". Así, yo, por ejemplo, pasé a ser el señor Señor F, Gandul nº 1 desde la izquierda. Subsecretario de comunicaciones internas, Ayuda de cámara (digital), nº 8 en la línea de sucesión (detrás de los demás gandules, menos Briks, del encargado de limpieza, de la secretaria privada del Jefe, del Elemento Sorpresa y del dispenser de agua). Y dentro de mis nuevas responsabilidades, se encuentra comunicar todo aquello que al amado líder le parezca demasiado poco importante como para no merecer ser twitteado. Así que, eso.

Sí, estoy muy feliz. Muy honrado, sobre todo. Nunca soñé con ser el vocero del Amado Líder. Y eso que tuve cada pesadilla que ni les cuento.

En fin. A lo nuestro.

En virtud a ser el Gandul del Mes, Yoni, el queridísimo y reputado Yoni, obtuvo ciertos derechos. Sólo por este mes. El mes que viene se viene la revancha, oh sí, mái preshhoss.., volveremos, volveremos, volveremo volveré...

  1. Una vez por semana, a él no le tocan más de dos latigazos en la Ronda de Gandules.
  2. Podrá sintonizar todos los partidos de la primera división en la radio FM, siempre que lo haga con audífonos, con el volumen bajito y sin gritar ni por los goles propios ni por los ajenos.
  3. Podrá sentarse en un almohadón mullido, en tanto y en cuanto éste sea proveído por el propio gandul, y esté equipado con un whoopee cushion.
  4. Una vez al mes, podrá delegar la redacción de su artículo en otro gandul, siempre que este esté por debajo de él en la línea sucesoria.

Y, según me explicaron, el hecho de que Briks haya saltado en una pata gritando "canto no hacerlo" apenas se enteró puede ser considerado una reserva válida, así que soy, literalmente, el último orejón del tarro.

Asi que me toca a mí. Veremos cómo sale.







Schadenfreude.


Apócope*: Fútbol, sensatez y sentimiento.

Schadenfreude. Hermosa palabra. Se dice "tshádenfrroid", y es el vocablo alemán (¿qué otro pueblo puede inventar una palabra tan magnífica?) para describir el sentimiento de alegría causado por el sufrimiento ajeno.
Algún purista, alguno de esos exquisitos, me va a decir que una de las acepciones de la palabra "regodeo" tiene el mismo significado, pero yo me quedo con Schadenfreude. Más fuerte, más directa, menos confusa. Es una palabra-fuerza.

No sólo es un buen concepto. Es uno de los pilares fundamentales de nuestra sociedad. Lo que nos separa de los primates. Lo que lleva al deseo constante del éxito.

Y por supuesto, esa sinfonía del sentimiento no podía estar ausente en la más abyecta y denodada expresión de la humanidad de los argentinos: el fútbol.

O, si se prefiere, el football.

Balompié no, eso es de gallegos.

A lo que vamos.

Seguramente entre mis respetables lectores (y entre los no respetables también) habrá varios, tal vez una mayoría, que sientan inclinación por dicho deporte, e incluso hayan adoptado un fanatismo particular por algún club, argentino o del exterior. A ellos está dedicado este artículo.

Me dirán que soy un amargo, que no entiendo nada. Que irse hasta Bahía Blanca para hacerle el aguante a tu equipo cuando juega contra Olimpo no lo hacés por regodeo, sino tal vez por un poco de masoquismo. Que por encima de toda la mezquindad, uno quiere ver ganar al propio equipo, y que Riquelme sea feliz.

¡PATRAÑAS! ¡MENTIRAS! ¡EXCUSAS, de pequeños corazones que se niegan a abrazar la verdadera naturaleza humana, a aceptar esa miserabilidad que emana desde nuestras tripas!

Usted quiere ganar, pero sólo para que el otro pierda.

Que quede claro de una vez: El fútbol está hecho para disfrutar de la desgracia ajena. No importa que el propio equipo haya hecho una campaña mediocre, que no gane, que el uno de los ídolos del equipo se retire y el otro sea tan amargo que Pepsico tiene que pagarle para que sonría, o que el club esté en quiebra y dominado por las barrabravas. Eso son detalles. Porque en el fútbol, ganar no es fundamental. Sólo importa que el otro pierda. O empate. O le vaya mal.

Usted como buen hincha alentará a los jugadores, arrasará barrios enteros cuando pierda, pero en el fondo la pelea es otra. No busca hinchar porque el plantel o la dirigencia sean de excelencia. Mientras que pierda el club de la contra, importa poco y nada que el presidente sea más rico que el pan casero y los jugadores sean once muertos.

Los malos momentos propios, sean culpa del equipo o de Don Julio, son una circunstancia, mientras que los del otro sean peores.

Y si nada de esto es cierto, ¿por qué sigue habiendo hinchas de San Lorenzo?


Tengan ustedes muy buenas noches.


*El señor Renegado sabrá perdonar este homenaje a sus "sincópisis" y "Siconspins"

MIB :la tira - 4

MIB Gourmet


Primer programa de cocina emitido por escrito.

Conducción: Francis Nardo Lópes - El Chef temperamental



(Suena música folklórica de fondo. La cámara va realizando un lento paneo de un parque muy bien cuidado, en el que se ven unos árboles, alambrados a lo lejos, un carro y cosas así de campo.
Luego el plano corta y comienza a mostrar una parrilla, leña, y un tablón largo sobre dos caballetes sobre el cual se encuentran distintos ingredientes e implementos de cocina.
De un costado aparece el Chef Lópes muy sonriente, vistiendo una bombacha de gaucho, zapatillas, una camisa con pañuelo al cuello, una boina y un delantal de cocinero que tiene la inscripción “¡Un aplauso para el asador!” en la parte frontal.
La verdad, queda medio ridículo).

¡¡Hola hola hola hola hola!! ¿Cómo están? ¿Cómo les va? Muy, pero muy bienvenidos a este nuevo programa. Yo estoy re fe-liz de estar aquí nuevamente, para compartir con todos ustedes este maravilloso y, por sobre todo, gratificante, mundo de la cocina.
Es un placer verdaderamente estar acá (Sonríe).

Y hoy, como verán, nos hemos trasladado hasta este hermoso lugar… miren que lindo (hace un ademán como señalando el paisaje que lo rodea), cuanto verde, cuanto aire fresco, cuanto sol… Que be-lleza, realmente (extiende los brazos, cierra los ojos hace una inspiración laaaaarga llenando su pecho de aire. Luego exhala y sonríe como muy relajado y feliz)… estamos aquí, les decía, porque vamos a dedicar el programa a nuestra tan tradicional cocina a la pa-rrilla eh. Esa forma de cocción a los fuegos, o a las brasas, como se suele decir, tan, pero tan cara a nuestra identidad ¿No?… Si, claro que si… (Suspira contento) Que lindo, pero que lin-do…

Moooooy bien… ¿Pero que les parece si vamos ya mismo a la receta? ¿Si? ¿Dale? Buenísimo…

Para empezar, entonces, como siempre, lo vamos a hacer con algo bien, pero bien sencillito eh, pero, por supuesto, muy pero muy delicioso (mira a cámara guiñando un ojo), porque la intención hoy es, simplemente, comenzar a familiarizarnos con la parrilla ¿Si? ¿De acuerdo?... Muy bien… Peeeeerfecto.

Como les decía, entonces, lo que vamos a preparar es un clásico bife de chorizo, muy simple eh, y lo vamos a acompañar con una guarnición bien bien sencillita, para nada complicada, de unas riquísimas papas al plomo ¿De acuerdo? ¿Si? ¡Vamos entonces! (Se refriega las manos muy entusiasmado, vuelve a inspirar largamente y expira haciendo un ligero sacudimiento de cabeza y mostrando una sonrisa exultante. Se lo ve feliz).
Les digo que esta es una receta que no fa-lla eh, es bien bien fácil y es algo que puede ser un excelente comienzo para aquellos que no estén tan acostumbrados a trabajar con la parrilla, pero que se quieran dar un gustito un fin de semana o, tal vez, por que no, quedar bien en alguna reunión así al aire libre eh (señala a cámara haciendo pistolita y guiñando un ojo). Esto siempre garpa, se los a-se-gu-ro jejeje…

Bien, vamos entonces aquí, a este tablón rústico que hoy va a ser nuestra mesa de trabajo, miren que lindo que es (acaricia el tablón), y vamos a comenzar preparando la carne eh… Miren… Miren, que hermoso pedazo de carne que tengo aquí en la mano (toma la carne con la mano izquierda y lo muestra, pero se da cuenta de que, al mismo tiempo, se estaba limpiando la mano derecha con el delantal, justo a la altura de su entrepierna. Se pone serio de golpe. Y un poco colorado. Mira fijo a cámara abriendo mucho los ojos, como con cara de asustado)… ¡Me refiero a este pedazo eh!… Por favor… No vayan a pensar que… (Carraspea un poco)… Bueno… Eeeehhh… (Mira de reojo para todos lados. Chasquea la lengua y hace un ligero meneo de cabeza. Suspira)… Bueno… Les decía, tenemos aquí eeeeessste pedazo de carne (Señala con ambas manos al corte vacuno) al cual vamos a sazonar muy simplemente con un poco de sal entrefina, aaaaaaaasí (agarra la sal de un cuenco y la tira sobre la carne medio canchereando) y un poco de pimienta negra, de eeeeeeeesta manera… Muuuy bien… Fantástico… Ahí está. Y nada mas eh. Esto es así, como les dije, muy, pero muy sencillo.
Lo que queremos es que se sienta el sabor de la carne ¿De acuerdo? ¿Me siguen? ¿Si? Moooy bien…

Bien, hecho esto lo reservamos, y ya, ya mismo, vamos preparando las papas al plomo, así bien rapidito, cosa de tener todo listo para cuando esté el fueg… (Se frena en seco. Se queda unos segundos mirando al vacío, estático. La cara se le transforma) ¡¡El fuego!! ¡¡No prendí el fuego!! (Mira con gesto de desesperación hacia la parrilla donde, efectivamente, la pila de leña aún se encuentra intacta) ¡¡Pero la p#*a madre!! ¡No puede ser! ¡Yo sabía que de algo me estaba olvidando! ¡Que tipo pel#&do! (Resopla. Se limpia las manos así nomás en el delantal y corre hacia la parrilla murmurando cosas. Se frena a medio camino. Amaga a darse vuelta. Se arrepiente. Habla solo, da otro paso, se pasa la mano por la cara. Sopla. Finalmente se serena, hace un par de respiraciones profundas, se acuerda de que está en cámara, finge una sonrisa y empieza a caminar como bananeando)… Bueno, bueno, no pasa nada eh. Esto, de todas maneras es de cocción rápida, así que vamos ya mismo a encender el fueguito ¿Si? ¿Dale? ¡Si! ¡Claro que si! ¡Vamos todavía! (Aplaude, pero medio sin ganas. Se le nota que ya se fastidió).

Bueno, lo fundamental a la hora de encender un buen fuego es el armado previo de la pila de leña ¿Si?. Yo, como verán, aquí ya tengo, afortunadamente, todo dispuesto en este sector de la parrilla gracias a mi producción… Aunque, claro, también se podrían haber molestado en avisarme que no lo había prendido ¿No? (Mira hacia atrás de cámaras con una terrible cara de culo) Pero bueno, no importa… Se ve que tenían algo mas importante que hacer...
Como les decía, aquí es donde vamos a generar unas bonitas brasas para la cocción posterior ¿Se entiende?... Bien... Excelente...
Para que el fuego encienda a la primera y no perder tiempo, ni fósforos (Mira a cámara esbozando una pequeña sonrisa porque le parece que lo de los fósforos fue una especie de chiste. Enseguida vuelve a bajar la mirada porque se da cuenta de que es malísimo)… Eeehhh… Bue… Decía, es importante que, además de realizar un centro con una buena cantidad de papel, se acomode la leña de manera que el aire pueda circular generosamente ¿ven como está acá?, ya que así el oxígeno va a ayudar a la com-bus-tión y alimentar la llama ¿De acuerdo? Muuuuy bien… Buenísimo…

Entonces vamos a encender eeessssstooooo… (Prende un fósforo y lo acerca cuidadosamente a un extremo de papel que se asoma entre la madera. El papel prende un poquito y enseguida se apaga. El Chef esboza una sonrisita fingida, haciendo como que no pasa nada)… Bueno… je… Esto puede pasar eh… No hay que desesperarse… Vamos de nuevo (Repite la operación, con el mismo resultado. Empieza a fruncir el ceño)... Bue… Pero que barbaridad… (Se muerde los labios nerviosamente)… A ver si ahora… (Lo vuelve a intentar y le pasa otra vez lo mismo. Resopla y putea apretando los dientes. Al toque prende otro fósforo. Se le apaga antes de llegar al papel) ¡¡AAAhhhhhh pero la recalcada con#%a de la lora loco!! ¡¡Que hijoderemilp#t@!! (Suspira tratando de no sacarse. Agarra dos fósforos juntos. Los enciende y los lleva hacia el papel. Ahí prende, pero muy despacito. El Chef se para con las manos en la cintura, mirando la minúscula llamita fijamente y como con odio. Se impacienta. Resopla. El soplido apaga la llamita. Se pone loco) ¡¡Aaaaaaaahhhhh bueeeeeeeeno, pero la renegrida caj%$a de tu hermana, fuego hijo de pu#@ y la rep&@amadre que te parió!! (Sale corriendo. Se va de plano unos instantes. Luego vuelve con un bidón, aparentemente conteniendo algún combustible, y lo vacía sobre la pila de leña) ¡¡A ver si ahora no vas a prender leña p#t@ y la recon#*@ de tu hermana!!... (Se acerca a la pila, enciende un fósforo y, apenas lo acerca al papel, la pila de leña estalla en una enorme llamarada en pleno rostro del Chef, que da un gritito y sale corriendo para atrás, dando saltitos, golpeándose la parte frontal de su cuerpo con las manos y echando un poco de humo. Cuando se calma, se ve que le quedó la cara y la parte de adelante de la boina toda tiznada. Además se nota que se quemó todas las pestañas y buena parte de las cejas. Le quedaron los ojos como dos huevos duros. Intenta seguir como si no hubiera pasado nada pero, obviamente, está caliente como una pipa)... Bue… (Tose)… Ahora que ya tenemos la leña bien encendida, agregamos algunos troncos mas gruesos y esperamos a que se generen las brasas que van a cocinar, finalmente, nuestra carne ¿Si? Bueno… (Resopla)...

Vamos entonces, ahora si, a preparar las papas al plomo, de la siguiente manera (Suspira con fastidio)...
Tomamos dos o tres papas medianas, calculen una o una y media por persona, y así nomás con cáscara, luego de lavarlas muy muy bien, las van envolviendo una por una en rectángulos de papel aluminio a los que, previamente, hemos rociado… (Hace una pausa)… del lado de adentro obviamente, donde va a ir la papa ¿Se sobreentiende no? Supongo que no tengo que explicar todo (Mira fugazmente a cámara muy serio)… lo rocían, decía, con un chorrito de aceite de oliva, un poco de sal, pimienta y alguna hierba aromática que les plazca. Si quieren. Si no le quieren poner hierbas no le pongan. A mi me importa tres pepinos. Gustos son gustos decía una vieja mientras se comía un jabón...
También si quieren hacer esta guarnición mas sabrosa pueden rellenar la papa con panceta, queso crema y demás cosas, pero ahí ya les tendría que explicar bien como hay que hacerlo y, la verdad, ya no tengo un carajo de ganas así que confórmense con esto (Resopla. Mira a cámara con cara de pocos amigos, lo cual en un rostro carente de pestañas y cejas queda muy gracioso).
Una vez que tienen las papas bien envueltas, las reservan hasta el mom… en… to… de (Mira las llamas de la leña que parecen estar perdiendo ímpetu) ¡¡Uuuuhhh, pero me ca#o en la p%t@ que lo reparió! (Gruñe. Deja todo lo que está haciendo, agarra una bandeja, va hacia la parrilla y le empieza a tirar viento para que prenda mas rápido mientras putea bajito. Se queda ahí apantallando como quince minutos. Al rato vuelve, medio sucio, todo transpirado y agitado)… Bueno (jadea) parece que el fuego ya va queriendo, pero igual para lograr la brasa que necesitamos falta un ratito, así que mientras tanto, yo voy a disfrutar de este lindo lugar… (vuelve a jadear) y a descansar un toque porque me cansé...

(El Chef agarra una botella de vino y un vaso y se va a sentar a un tronco cercano mirando al suelo. Ni siquiera mira a la cámara. Se manda un par de vasos de vino. Acaricia un perro que se le acerca. Suspira. Mira al cielo. Menea la cabeza. Toma otro vino. Mira hacia la parrilla. Se refriega la cara. Como veinte minutos después, se para como con desgano, bebe el último vaso de vino y vuelve al lugar de trabajo. El perrito lo acompaña saltándole al lado. Le tira un pedacito de pan para que se deje de joder. Deja de mala gana la botella medio vacía en la mesa de trabajo y va arrastrando los pies hasta la parrilla. La mira con bronca).

Bueno, yo creo que ya hay buena brasa, así que con la pala brasera las vamos disponiendo de forma pareja y uniforme debajo de la parrilla, aaasí … Mmoooy bien…. Aaaaaasí … Bien… Perfecto… (Ve que le quedó bien parejita. Eso le mejora el humor. Hace una pequeña sonrisa). Muy bien, controlamos entonces que el calor sea uniforme colocando la mano cerca de la superficie de la parrilla, y cuando constatamos que es el indicado… a verrrr… mmmsi, si, si, para mi ya está… Ahora si, por fin, vamos a proceder con la receta eh ¿De acuerdo? Bien… (Se vuelve a entusiasmar, aunque mucho no se le nota porque sin cejas mucha expresión no tiene). Perfecto…

Lo que hacemos ahora es traer las papas envueltas en el papel aluminio, y arrojarlas directamente sobre las brasas.
Si, así como lo oyen, sobre las bra-sas, así nomás, para que se vayan haciendo ¿Si? Bárbaro… (Agarra una papa y la tira así medio de lejitos a las brasas. Cae justo en el lugar en que debía caer. El Chef mira a cámara con aires de triunfo y sonríe. Se ceba e intenta repetir la operación con la otra papa, pero la tira un poco fuerte y la papa pasa de largo y se cae al suelo. Al Chef se le borra inmediatamente la sonrisa. Sale de plano unos segundos y reaparece sacudiéndole la tierra a la papa. Insiste con intentar el tiro de media distancia. La papa pega en el borde de la parrilla y vuelve a terminar en el suelo. El Chef pierde la compostura. Se pone todo colorado. Levanta la papa, la agarra con ambas manos y le grita acercándosela a la cara y con las venas del cuello inflamadas) ¡¡¡Pero la rep#*tísima madre que te reparió papa p#t@!! ¡¡Quedate en las brasas imbécil!! ¿¿Me escuchaste?? ¡¡En las brasas, la rechon#@ p&%a que te parió, tubérculo del o#@o!! (Se acomoda de nuevo, bufando como un toro, y bordó de la calentura. Mide el tiro entrecerrando los ojos y sacando un poquito la lengua por la comisura de los labios. Vuelve a arrojar la papa, con tan mala suerte que hace carambola con la otra papa que ya estaba en su lugar y las dos se le caen al piso) ¡¡¡¡AAAAHHHHHHHHHH!!! ¡¡¡Que hiajdepuuuuu#aaaaaaaaaaa!!! ¡¡Pedazo de mierrrr%a!!! (Va corriendo, agarra la primer papa y la pone entre las brasas con la mano. Se quema. Grita insultos en japonés. Gruñe. Rezonga. Agarra la papa rebelde y le aplica un derechazo cruzado al mejor estilo saque de arco que hace que se pierda en la lejanía. Se queda ahí respirando muy agitado y con cara de loco).
Bue… igual para mi que con una papa es suficiente ¿No?... Si, claro que si la p$ta madre que lo parió ¿O alguno tiene alguna objeción?... ¿¡Eh!?... Ah, ya me parecía…

Bueno… Entonces, ahora que ya tenemos la papa conc#&d@ esa cocinándose en las brasas y la parrilla a temperatura, vamos a buscar por fin el bife de chorizo que habíamos condimentado con anter… (Llega hasta el tablón y empieza a buscar el bife. No lo encuentra. Busca con la mirada. Se rasca la cabeza. Se para con las manos en la cintura. Sopla. Frunce el ceño sin cejas. Chasquea la lengua. Hace un gesto con los brazos como de no entender que cuernos pasó)... Che ¿Y el bife? Yo lo había dejado acá eh… En serio… Tan loco no estoy… (Suspira con fastidio. Mira para arriba. Se pone mal) ¡¡Pero será posible loco!! ¡¡¿Alguien me puede decir donde mie#da está el bife del o#to ese?!! ¿¿Qué car@jo pasó?? ¿¿Resucitó y se fue caminando?? ¡¡Donde cuernos está la carne hijos de p… (En ese momento mira para un costado y ve al perro echado abajo de la mesa, que lo mira moviendo la cola muy pancho y masticando el último trozo del bife de chorizo. El Chef explota de furia) ¡¡Aaaaaaahhhhhhhhhhhh pero mirá vos y la recontrarep#%&ima madre que lo reparió!! ¡¡Ese perro pulgoso hijo de p#ta me afanó la carne y me c@go en la recalacada arg&%$a de la cotorra loco!! ¡¡Esto es el colmo!! ¡¡No puede serrrr!! ¡¡No puede serrrrrrrrrrr!! (Da un grito y se pone a dar patadas en el suelo como hacía El Chavo cuando se enojaba) ¡¡Que injusticia loco!! ¡¡No me sale una bien!! ¡¡Ni una!! (Camina en círculos puteando en varios dialectos. Se saca la boina y la tira contra el suelo con furia. Grita mirando para atrás de cámaras y agitando exageradamente los brazos) ¡¡¿Nadie se fijó que el perro de mi#rda ese no se robara el bife, producción?!! ¡¡¿¿Nadie??!! ¡¡Manga de inútiles hijos de una gran p#t@ y la re&#ta que los parió!! ¡¡¿Todo yo tengo que hacer?!! ¿¿Todo?? (Se pone mal. Se le llenan los ojos de lágrimas de bronca. De la calentura patea un tronco, pero como era medio pesado se hace pomada el pie. Grita de dolor. Sale rengueando. Se apoya en el tablón con la cabeza gacha. Respira agitado. Se queda así en silencio por unos minutos. Se reincorpora. Menea la cabeza. Sopla. Se saca el delantal y lo tira).

Bueno… y eso es todo por hoy.

La papa que está en las brasas, que la vaya a sacar Magoya. Me chupa un hu#vo.

Espero que hayan disfrutado de la receta, y si quieren saber como quedó, pregúntenle al perro.
Yo ahora me voy al car@jo mientras ustedes se quedan viendo el paso a paso y de paso, como siempre, se pueden ir todos, con el perro incluido, a la recalcada con#$a de su hermana.

¡Nos vemos la próxima! ¡Buen provecho eh!

(Hace un chau medio mala onda con la mano y se aleja rengueando.
Cuando pasa al lado del perro medio como que amaga a tirarle una patada. El perro se calienta, le empieza a garronear los talones y lo saca carpiendo.
La cámara se va alejando despacio mientras suena música de malambo de fondo).


Jiu-jitsu

El jiu-jitsu (柔術 ), "el arte de suavidad") es un arte marcial japonés que abarca una variedad amplia de sistemas de combate basado en la defensa "sin armas" de uno o más agresores tanto armados como desarmados. Las técnicas básicas incluyen principalmente luxaciones articulares, y además golpes, esquivas, empujones, proyecciones, derribos, y estrangulamientos. Estas técnicas se originan en métodos de batalla de los bushi (guerreros japoneses clásicos), para hacer frente a otros guerreros samurai con armadura.

Fuente: Wikipedia






Martes 10:22. Oficinas centrales de Kag & Onos


Pérez ingresa presuroso a su oficina con cara de pocos amigos. Sin dirigir la palabra a nadie cierra la puerta con cierta violencia. Segundos después suena el interno de Maldini.



Maldini:- ¿Hola?
Pérez:-Maldini, a mi despacho. Ya mismo.

Martes 10:23. Oficina de Pérez

Maldini:-Buen día, jefe.
Pérez:-¿Buen día? ¿A esta porquería de día llama buen día? Tome asiento, haga el favor...
Maldini:-¿Pasó algo, jefe?
Pérez, imitando burlonamente el tono de Maldini:- "pazoalgojefeeee???' Claro que paso algo, Maldini...Usted pasó! ¿Que voy a hacer con usted, Maldini? ¿eh? ¿Qué tengo que hacer?
Maldini:-No...no sé de que me habla, jefe...

Pérez, a la burla ahora agrega unos movimientos "poco varoniles" con las manos

Pérez:-"Aynosedequemeablajefeeee! Nosedequemeabla...". Usted nunca sabe de que se habla, Maldini, ¿cual es la novedad?
Maldini:-Sr. Pérez yo creo que nunca le fal...
Pérez:-No se moleste en tratar de adivinarlo, yo se lo voy a decir. Pero antes dígame, Maldini: a usted ¿le pegaban mucho de chico o es imbécil así...genéticamente, digamos?
Maldini:-Señor, le pido que ...
Pérez:-USTED NO ESTÁ EN CONDICIONES DE PEDIRME NADA, INFELIZ!
Maldini:-Pe...pe...pero....
Pérez:-¡Pero nada! Antes de abrir esa bocota piense muy bien lo que va a decir, a quien se lo va a decir y cómo y cuando se lo va a decir! ¡Gente grande, caramba!

Pérez, inspirando hondo, toma una pastilla de uno de los cajones de su escritorio y la toma ayudándose con un vaso de agua. Cierra los ojos y juntando las manos habla con una calma forzada, imposible...

Pérez:-A ver, Maldini, querido, vamos a tratar de calmarnos un poco...¿si?. Yo sé que usted es joven y por lo tanto impulsivo, pero dígame: ¿cómo se le ocurre quejarse con López de que a usted en esta oficina no se lo valora o que sus opiniones nunca son tenidas en cuenta? ¿eh? ¿Cómo se le ocurre?

Maldini espera un instante, para asegurarse que Pérez esta vez quiere escucharlo. Sólo cuando se siente convencido que esta vez no lo van a interrumpir responde.

Maldini:-Pérez, me extraña que usted, un hombre de su experiencia, no reconozca un malentendido cuando es tan evidente. Lo que yo le dije a López es que lo que no se tuvo en cuenta o no se valoró fue nuestra opinión, la de nuestra división, respecto de la inviabilidad del proyecto Aguilar. No hablaba de mi opinión o valoración, sino la de la división a su cargo, Pérez. En otras palabras, lo que a mi entender a quien no se valoró fue a usted, Pérez, en tanto y en cuanto usted es el jefe del grupo. ¿Me entiende?

Pérez se incorpora de su asiento y se acerca a la puerta, en evidente señal de que la conversación estaba finalizando, mientras va diciendo:

Pérez:- Ahhh nooo, ¡esto no va a quedar así! Discúlpeme el mal momento, Maldini. Ahora mismo voy a hablar tres o cuatro cositas con López. -le palmea el hombro a Maldini, que ya se había incorporado a su vez y abandonaba la oficina- bien dicho, entonces... ¡bien, muy bien!

Maldini se aleja de la oficina para ir a su escritorio, mientras murmura:

Máldini:- Que sería de nosotros, pobres mortales, sin el viejo Jiu-Jitsu....Ahora mátense ...

Me revuelvo en la cama



Acápite: Sueño un sueño enojoso, una trama intrincada.




Me revuelvo en la cama. Sueño un sueño enojoso, una trama intrincada. No duermo bien, y eso ocurre porque tengo algún asunto pendiente, aunque no sepa identificarlo en este estado ausente de consciencia.

Una señora de mediana edad. Se llama Imperio. En mis sueños las señoras de mediana edad suelen tener nombres medio extraños.

Imperio no es feliz, y en consecuencia su vida se encuentra plagada de actos, dichos y pensamientos que debe ocultarle a su marido. No me refiero solo a su miserable condición, sino a los parches que debe inventar para paliar el sufrimiento.

Me revuelvo en la cama. Sueño un sueño enojoso, una trama intrincada.

Irrumpe el marido. Se agita, se acomoda el vestido, prende un cigarrillo Imperio.

Me pongo el traje de Batman y jugamos a la liga de la justicia, dice el hombre. Se niega Imperio, interpone excepciones, se toma el rostro y se escandaliza. Ese traje está sucio, todo bañado en almíbar, como lo dejaste la última vez. Qué raras esas cosas que te gustan. Almíbar…

No importa, separalo.

Al-Mib-Ar.

El traje, mujer. Separá el traje. Además la sílaba Mib no existe, bruta.

Me revuelvo en la cama. Sueño un sueño enojoso, una trama intrincada. Hay un mensaje que no descifro. Un asunto pendiente.

Se quita la ropa el hombre, con mucha velocidad. La tira a un costado de la cama y enciende un cigarro. La última vez armaste un incendio, recuerda Imperio. Apagá eso, viejo incendiario. ¡Fuego! ¡Fuego!

Me revuelvo en la cama. Sueño un sueño enojoso, una trama intrincada. Algo me suena familiar.

Mejor ponete el de teletubbie que encima está a mano. Si habré renegado para lavar ese traje de Batman… y no salió eh, no salió.

El de teletubbie no me gusta. Parezco un enano depravado.

Es lo que hay. Se planta Imperio con cara de pocos amigos, decidida a torcer la voluntad de su esposo.

Me revuelvo en la cama. Sueño un sueño enojoso, una trama intrincada. Algo me está faltando.

Basta de palabras mujer, que no vine a filosofar sino a mover la cadera. Dejemos la filosofía para el Señor Pablo.

¿Feinmann? Interpone el cuerpo Imperio. Entre su marido y el ropero. Entre el hombre y el traje de superhéroe.

No, otro. No me acuerdo el apellido.

Me revuelvo en la cama. Sueño un sueño enojoso, una trama intrincada. Hay un asunto pendiente, eso es seguro.

La aparta el marido de un empujón. Y abre la puerta del ropero. Un hombre de frondosa cabellera salta al exterior. Intenta una fuga.

¡Farsante! ¿Qué hace ese fantoche envuelto en mi frazada? ¡Fraguaste un plan y fracasaste! ¡Arruiné el final feliz de tu fiestita!

Cuántas efes. Señor efe te voy a llamar a partir de ahora. Y sí, es una fiestita, porque el caballero cumple años. Y yo siempre me acuerdo de los cumpleaños. Se vuelve altanera Imperio, sabiendo que todo está perdido.

Me revuelvo en la cama. Sueño un sueño enojoso, una trama intrincada.

Alcanza el marido al pícaro aventurero justo cuando se dispone a saltar por la ventana. Intenta retenerlo tomándolo de la cabellera, pero la misma se desprende revelando una lustrosa calva. Y entonces la huída se concreta.

Grita el hombre apoyado en el marco de la ventana, agitando la peluca mientras el calvo cumpleañero corre desnudo en dirección a la avenida.

¡Ya te voy a agarrar a vos, cumpleañero! ¡Miserable! ¡Seguís vivo gracias a este artículo de bajísima calidad!

Me revuelvo en la cama. Sueño un sueño enojoso, una trama intrincada. Hay algo. Hay un asunto pend…

La sílaba… el miserable… un artículo de bajísima calidad… cumpleaños...

¡El artículo de MIB!

¡ME OLVIDÉ DE ESCRIBIR EL ARTÍCULO DE MIB!

¡Y JUSTO EN EL DÍA DEL CUMPLEAÑOS DEL AMADO LÍDER!

Me revuelvo en la cama. Sueño un sueño plácido, una trama melodiosa. Me acordé justito. Todo tiene solución. Todavía hay tiempo de escribir un artículo, aunque salga una porquería. E incluso podría comprar un regalo y evitarme los azotes.

Suspira Batman y pregunta qué título le ponemos.

¿Al artículo?, pregunta el teletubbie malhumorado.

A la obra, sí, responde Pablo Feinmann estirando las piernas en la silla. A todo lo que pasó en este sueño.

Llora Imperio al tiempo que se retira de la habitación. Quizás de la casa. Farfulla el marido aún apoyado en el marco de la ventana, mirando en dirección a la avenida.

A mí se me ocurre uno. Ya no me revuelvo en la cama. Ya no sueño un sueño enojoso. Tampoco un sueño plácido. No hay trama intrincada. Ni siquiera melodiosa. Estoy completamente lúcido y con ganas de poner mi granito de arena en esta obra, aunque más no sea titulándola.

A lo nuestro entonces, que en esta ocasión serán solo siete palabras:

“Por un calvo se perdió el Imperio”

¡No se puede titular así! ¡Se pierde el remate de la obra!, grita el calvo cumpleañero desde la seguridad de la avenida.

Encima da órdenes. Hay que tener coraje. Me pregunto quién lo habrá nombrado director.

Me revuelvo en la cama. Son las tres de la mañana y ya no voy a poder pegar un ojo. Si me quiero ahorrar los azotes más vale que me lave la cara y me ponga a pensar en el asunto del regalo. A lo mejor los otros se olvidan y me gano el 'Gandul del mes'.


Tengan ustedes muy buenas noches.

PS: SE LES RECUERDA A LOS AMABLES LECTORES QUE PARA COMENTAR EN EL DÍA DE LA FECHA DEBERÁN SACARSE EL SOMBRERO, HACER LA CORRESPONDIENTE REVERENCIA Y CONCURRIR MUNIDOS DE UN BONITO PRESENTE (VALE REGALAR PLATA), YA QUE HOY, EN EFECTO, ES EL CUMPLEAÑOS DEL AMADO LÍDER.

PS2: QUEDAN USTEDES DEBIDAMENTE NOTIFICADOS.

PS3: ¡FELIZ CUMPLEAÑOS AMADO LÍDER!

MIB: la tira -3

ARTE, ARTE !!

Aquellos que piensan que sólo soy un cuerpo escultural y un rostro bendecido por los dioses…
se equivocan


Ni siquiera soy eso

No obstante, a fuerza de constancia y, por qué no decirlo, algunos coscorrones, he alcanzado cierto grado de instrucción.
Conjugo con éxito la mayoría de los verbos, puedo escribir con un nivel aceptable de faltas de ortografía y sé freír un huevo sin romper la yema.
Utilizo herramientas, sumo, resto y diferencio a primera vista los distintos tipos de artrópodos.
Comprendo otros idiomas, ejerzo una profesión y domino el arte del balón pie en un nivel 8 (escala 1-10 no pro).
Poseo razonable pericia en las artes amatorias, no me resulta ajeno el empleo de la ironía y conozco a la perfección las partes esenciales de un reactor nuclear de fisión (que son 7, les comento)

En fin, nada que un tipo común no pueda aprender con un mínimo de esfuerzo.

Ahora…lo que me desvela, lo que no alcanzo a asimilar…mi talón de Aquiles…es “EL ARTE”, así, en abstracto. Porque esta claro que sé de qué se trata pero, oh vamos, no todo es “ARTE”

Ciertas expresiones musicales y/o pictóricas (ponele) no admiten discusión. Frente a ellas uno no puede menos que maravillarse extasiado; pero otras…
Algo así como comparar una escena lésbica entre Megan fox y Angelina Jolie con el piquito de Moria Casan y Graciela Alfano

Sin ir más lejos (porque si se aleja del monitor no va a leer un joraca) hace muy poco vi un fragmento de una obra francesa del año 2008.
Aproximadamente 20 personas sobre el escenario. 10 tipos y 10 minas.

Se abre el telón.

Las 20 personas, con una botella de agua mineral en la mano (como lo lee) miran la nada, es decir, fijan su visión en un punto lejano del horizonte…como reflexionando después de una carrera pedestre, me figuro, digo…por la botellita de agua.

Pasan 3 minutos y nada.

5 minutos…

cri cri cri …

todos inmóviles y en silencio…

8, 9, 10 minutos y los tipos duros…estuve a punto de chequear la pc pensando que se había planchado.

Recién como a los 15 minutos y emulando (imagino) el efecto “cámara lenta” los 20 “actores” comienzan a moverse muy muuuuy despacito.
No se ilusione.
No seremos testigos de una discusión de mimos hiperactivos; ni siquiera veremos una mala imitación de una estatua viviente, nada de eso.
Los caraduras apenas mueven un brazo - el que sostiene la botella de agua - para llevarla al punto exacto en el que comienza a derramar su líquido incoloro, inodoro e insípido sobre la cabeza de cada uno de ellos.
Me sigue, no?
Le juro que no estoy exagerando nada.
El resultado no puede ser otro.
Tipos y minas empapados, espectadores al limite de la paciencia y la indignación (me estoy refiriendo a mi)

Acto seguido, los “artistas”, mojados de pies a cabeza, se desprenden de la botella…y de sus ropas.
CARAMBA !
Al fin un poco de acción, sospecho que esto ahora sí se pondrá bueno.

Comienzan a danzar frenéticamente como si hubieran descubierto el mensaje satánico oculto en la tira “Los Únicos” hasta que, como tocados por un rayo, caen muertos sobre el escenario (aquí me resulta dificultoso diferenciar entre el efecto que buscaban lograr los “artistas” y mi más interno y fervoroso deseo) (que caigan muertos sobre el escenario, se entiende. Fulminados por un rayo o mordidos por un chihuahua rabioso, no me importa)

20 personas, totalmente desnudas, yacen sobre el piso.
Uno siente que ha llegado tarde a la orgía.

De pronto, sin previo aviso, una dama, una de las muchas que exhiben sus partes pudendas en nombre del arte, reencarna en “La Sirenita” y como si no tuviera miembros inferiores comienza a deslizarse por el escenario, justamente, entre los muchos miembros que la rodean (interprételo como quiera, todavía no sé cómo guardo la compostura)

Una especie de “culopatin” pero boca abajo.
Aprovechando la humedad de la superficie (la habían mojado, se acuerda?) se arrastra con poca gracia pero con mucho entusiasmo de un lado para el otro, ora a la derecha, ora a la izquierda. (y viceversa)
Todo esto con una sonrisa estúpida en la cara y una musiquita de fondo realmente infernal.
El típico pianito monocorde de las películas de terror. Ese que anuncia la llegada inminente del asesino serial que terminará con todo.
Acá no tendremos esa suerte.

Justo cuando uno espera (implora) que por un extremo del escenario entre un buque ballenero y acabe con la improvisada sirenita de un arponaso entre los ojos, el resto de los actores, los que hasta entonces no eran más que obstáculos en pelotas, cobran vida y se unen a la danza de la primera…
bah…
danza…
Se arrastran de aquí para allá como si les hubieran afanado la silla de ruedas.
Los más diestros toman velocidad, impulsados sabe Yisus con qué, y entonces extienden los brazos representando un avioncito.
“la gran Rambert” se llama (lo siento señoritas. No voy a explicar que es esto)

“DIVINO” - piensa usted mientras se imagina masticando la cabeza del canario de su abuela, aún cuando su abuela murió hace años y nunca tuvo un canario.

El “arte” es así, nos transporta a lugares que ni imaginábamos, vistessss?

Pero espere, que esto sigue
Después de un buen rato de nadar entre pitos y tetas y como por mandato celestial, todos comienzan a convulsionar como peces fuera del agua. Posta, no exagero.
Alguna vez vieron un pez fuera del agua ?
Bueno…IGUALITO

5 minutos de agonía y …
ZAS !!

TELON




Incrédulo, me descubro boquiabierto y muerto de frío; tardo un par de segundos en volver en mi, miro hacia los costados y lamento no tener compañía humana para compartir la reciente experiencia.
Chopper me observa aburrido y comienza a lamerse las partes.

Es evidente que él entiende de arte más que yo.



PD: para los incrédulos que piensan que me lo inventé, la obra se llama “Um peu de tenderse bordel de merde”; googleen

Ah! Y no es porno !!

MIB :la tira -2


Camino a Jólibud II: El regreso


Escribe Quintín Tarantoni - Jóven guionista y estudiante de cine que sigue esperando su oportunidad para revolucionar el séptimo arte.



Sinceramente, después del rotundo fracaso (si, porque fue un fracaso. Un fracaso monumental. Debo reconocerlo. Y aunque no lo reconozca, igual sigue siendo un fracaso) en cuanto a la repercusión que consiguió el guión que di a conocer aquella vez, creí que no iba a poder volver a escribir. Creí que mi carrera en el cine se había terminado. Y eso para mi es grave, porque el cine es mi vida loco ¡Mi vi-da!.
Por eso fue que me re bajonié mal, man, pero maaaallll. Tanto que, y me da un poco de vergüenza decirlo, quise matarme. Si, en serio. Me pegó muy fuerte el rechazo y la indiferencia que recibí de… bueno, de todo el mundo.
Porque uno no se acostumbra al rechazo. No importa que me hayan rechazado, ignorado, echado de canales, tirado mis guiones por la cabeza y sacado a patadas de muchos estudios cientos de veces. Siempre duele como la primera vez.
Y por eso quise ponerle fin a mi sufrimiento.
Porque, si el mundo no va a valorar mi talento; si no puedo hacer realidad mis sueños ¿Qué sentido tiene seguir? ¿Para que? ¿Para trabajar? Nooo, dejá. Prefiero terminar con todo de una.
Pero (suspira)… viste como es, que uno se propone algo, y el destino tiene su propio guión, y las cosas no salen como vos querés, y la vida te pone ante un giro argumental inesperado que lo cambia todo.
Yo quise suicidarme, si, pero no se me dio, por esas cosas de la fatalidad.
Pasó que me iba a ahorcar, pero medio como que no calculé bien la medida de la soga y como me quedó un poco larga cuando me tiré del árbol (porque me subí a un árbol) me hice bolsa contra el suelo. Me rompí todo. Por querer suicidarme casi me mato. No me sale una.

Pero tome eso como una señal loco. Un signo de que no tenía que darme por vencido. Después de todo, seguramente todos los grandes del cine habrán sufrido contratiempos en sus comienzos ¿no? Si. Seguro.
Así que bueno, aproveché el tiempo que estuve en el hospital, enyesado, para reflexionar y ver en que podría haber fallado la última vez, y llegué a la conclusión que capaz que el género de acción ya esta muy trillado.
Además pensé en las sugerencias que recibí de parte de la gente (porque entre el insulto y la indiferencia mas absoluta, alguno que otro tiró sugerencias. Aunque la mayoría me sugería que me dedicara a otra cosa, pero bueno…) y creo que quizás tengan algo de razón. Hay que meter algo de sexo y romance. Un poco de todo. Pero mas de sexo, que es lo que vende. Algo que sea llamativo para todos los públicos. Bueno, por ahí para los menores de edad no tanto. Por esto del sexo. Pero igual…

Así que bueno, con eso en mente, y medio pancho por los calmantes, ahí nomás empecé a escribir un nuevo guión para una película, a ver si esta vez se me da.
Es algo bien novedoso eh, bien de vanguardia, algo nuevo para la pantalla grande que si consigo alguien que ponga la plata seguro va a ser un exitazo.

Todavía no está bien bien bien terminado, pero la idea de la historia, así a groso modo, iría mas o menos así:

Resulta que hay una minita, Candela Puann se llama, pero le dicen Dela.
Bueno, esta piba vivía con su madre en la gran ciudad (no sé, Chicago ponele, o Rosario, depende del presupuesto que consiga para filmar) y un día, porque la vieja medio se desconcha y se va con un tipo, tiene que irse a vivir con su padre a un pueblito así bastante bodrio, de esos medio perdidos del interior en los que no pasa nada y te morís del embole.
Obviamente ahí la piba muy muy feliz no es, pero igual se la banca porque no le queda otra, aunque siempre anda medio con cara de culo y mala onda (Lo cual queda demostrado en una escena en la que se la ve tomando una ducha, desnuda, con acercamiento en plano sugerente en el que se le ve un cuarto de teta, con gesto adusto. De ella, no de la teta).
Encima todo le empeora cuando va a anotarse a la escuela (a la secundaria o high school, depende donde lo filme) y se le pegan un grupo de nardos medio densos que después la siguen para todos lados y terminan siendo los únicos que le dan bola.
Peeeeeero (y atenti que acá viene el giro argumental que empieza a desencadenar todo), un día que estaba Dela en el comedor almorzando con su grupo de losers, ve entrar al salón a un grupo de flacos así muy muy conchetitos y medio rarones con pinta de emos y de tener toda la tarasca y uno de ellos, en especial, como que le atrae enseguida (lo que queda demostrado cuando, con plano corto, se la ve frotándose el pecho izquierdo con una mano mientras mira al tipo con los ojitos entrecerrados y mordiéndose lascivamente el labio inferior mientras dice bajito “Uhhh papurri, a ese me re lo co…”. Y ahí corta el plano de nuevo a general).
Entonces le pregunta a sus amigos que quienes eran esos chetos que habían entrado y los amigos le dicen algo así como que no se haga ilusiones porque esos son los Orten, la familia mas pudiente y mas excéntrica del pueblo y no le dan bola a nadie, y ese que a ella le llama la atención es Edgardo (aunque como son medio culo parado se hace llamar “Edgard”), y nunca se lo vió con ninguna mina por lo que se rumorea que se la come (porque en los pueblos la gente es así, chusma y malpensada).
Ahí la mina, Dela, dice entonces “Ah” así haciéndose como la que no le interesa, pero igual lo sigue mirando al flaco de reojo a cada rato mientras discretamente se sigue tocando (acá se irían alternando planos cortos de la mirada lasciva y de la mano apoyada en sus partes íntimas con música sensual de fondo y por ahí también un plano corto de la boca mientras se humedece los labios con la lengua).
Bueno, así pasan unos días y entonces resulta que ambos jóvenes por obra del destino coinciden en una clase y justo justo quedan sentados en el mismo banco (se que da como medio forzado, pero después veo como redondear la situación para que no quede tan obvio) y ahí que pim que pam que pum, se presentan, se miran con hambre, se histeriquean un poco, intercambian un par de frases medio boludas de esas que dicen los jóvenes cuando se alzan y como que nace entre ellos una atracción irresistible (lo cual queda demostrado al desarrollarse una escena representando las fantasías que en ese mismo momento le surgen a los personajes, y en la que se los ve completamente desnudos y teniendo sexo de manera desenfrenada, con planos cortos pero muy cuidados y artísticos en general y primeros planos bien grosos de la minita en tetas).
Desde ese día entonces, como que andan para todo lados juntos y haciéndose los noviecitos pero, sin embargo (y acá viene el toque de misterio de la cosa), Dela empieza a notar que el Edgard es un pibe medio extraño. Como que tiene algo distinto que no llega a identificar del todo y eso la pone algo inquieta (eso queda demostrado en una escena en la que ella piensa en él mientras se está bañanado, desnuda, con plano medio en el que se le ve bien el culo, con cara de intriga. De ella, no del culo).
Como no puede mas de la duda (y de la calentura) al día siguiente Dela va para el colegio determinada a enfrentar al Edgard y acribillarlo a preguntas para ver si le puede sacar ese “no se que” que tiene el pibe y que la tiene tan molesta (y excitada) y justo que lo ve en la esquina y va hacia él, un auto que venía a gran velocidad por la calle pierde el control y se le va encima a la chica.
Ella quiere correr para evitar ser aplastada pero se da la cabeza contra la pared (porque iba por la vereda y salió corriendo para el lado de la pared. No era muy brillante) y cae al suelo sintiendo que ese era su final.
Sin embargo, luego de sentir un fuerte ruido, levanta la cabeza (algo mareada. Y excitada) y lo ve al Edgard ahí a su lado y (y ojo que acá viene un momento clave de la historia y el giro sorpresa que hace que la gente haga “¡Uuuuuuuuhhhhhh!”) ¡el chabón estaba deteniendo el automóvil con una sola mano!.
Ahí ya si, Dela está segura de que el flaco le está ocultando algo y cuando todo se calma le pide que la acompañe al bosque para hablar.
Ahí la toma corta a plano de la pareja en el medio del bosque.
Toma de primer plano de la cara de la chica, música de suspenso de fondo, y ella que dice “Tenemos que hablar”.
-Si -le contesta Edgard- pero antes…
Y ahí la besa apasionadamente y se tiran al pasto, se sacan la ropa y hacen el amor frenéticamente, en varias posiciones, con planos cortos, largos y medios, muy cuidados, y que sugieren pero no muestran nada (salvo en un par que se le ven las tetas a la protagonista).
La escena termina en fundido a negro, y luego corta a primer plano de los rostros de los protagonistas, muy relajados y mirándose completamente enamorados.
Y ahí él le dice -Tengo algo que confesarte, pero temo que al hacerlo las cosas entre nosotros cambien.
-No -le dice ella- No temas. Puedes decirme lo que sea ¡oh amor mío!, porque lo que siento por ti es tan profundo que nada podría hacer que cambie. Te amo Edgard. Te amo como nunca he amado a nadies-.Y ahí empieza a sonar una música romántica de fondo.
-Bueno -le dice el flaco tomando aire -Yo, Dela (ahí manda pausa dramática) yo soy… (otra pasa dramática. La música va cambiando a suspenso)… Soy… (última pausa dramática con música de esa que anuncia que algo va a pasar)… Soy… ¡un vampiro! (Acá va un golpe musical tipo ¡¡¡CHAAAANNNNNN!!!).
-¿¿¡¡Lo que!!?? -grita la piba -¿¡Qué sos un vampiro!?
-Si, pero por fav..
-¿¡Un muerto vivo!? ¿¡Un chupasangre!?
-Bueno, ssi -responde Edgard con cara de circunstancia- pero …
-¡¡¿Un ser sin alma?!! ¡¡¿Una criatura de la oscuridad?!! ¡¡¿Un engendro de la noche?!! -sigue ella.
-Si bueno, si… -le contesta el flaco ya medio angustiado- pero dejame que…
-¡¡¡Que ascoooo!!! -grita Dela desencajada- ¡Y me lo decís ahora después de que me poseíste, de que tomaste mi cuerpo y mi sexo de todas las formas conocidas, y tocaste mis senos y lamiste mi c…
-Bueno, bueno, pará -dice Edgard algo incómodo- Tampoco te obligué, viste…
-¡Me engañaste!- grita ella.
-¡No!- responde él.
-¡Me mentiste!– vuelve a gritar ella
-¡No!- vuelve a responder él.
-¡Y jugaste conmigo del modo que tu mas querías!- sigue gritando ella mientras se viste.
-¡No!- repite el muchacho que discutiendo no era muy hábil.
Y ahí la mina sale corriendo y gritando, y un poco llorando espantada, pero él la alcanza al toque porque tiene supervelocidad de vampiro y la agarra de un brazo.
Ella le grita “¡¡Soltame monstruo inmundo!!” y, en un arranque de furia, alcanza a arrancar una rama cercana que justo justo se corta con forma de estaca, y se la clava en el corazón a Edgard, que da un chillido desgarrador y luego estalla en llamas.
Dela se queda ahí entonces llorando, medio en shock, cae de rodillas, después grita y después va y se baña, completamente desnuda, en un lago cercano (con plano de las tetas que se ven a través del agua que era muy cristalina).
Y bueno, a partir de ese día ella abandona el pueblo y se va a vivir a otra ciudad, donde se dedica a estudiar cosas acerca de los vampiros y demonios y toda clase de seres sobrenaturales.
Al poco tiempo ahí conoce a un bibliotecario (que se me ocurre que puede ser un tipo inglés, así muy formal y medio estirado) que le cuenta que la había estado buscando desde hacía muchos años porque ella es la heredera de una ancestral raza de cazadoras, y él tiene la misión de entrenarla y eso y, a partir de ahí, juntos, se dedican a matar a todo tipo de criaturas sobrenaturales y cosas así.
Entonces comienza así para la protagonista una nueva vida, completamente distinta a la que venía llevando, y para eso, y para borrar su tenebroso pasado, se cambia la identidad y se empieza a hacer llamar “Muffy, la cazavampiros”.

Y así.

Y ojo porque eso es solo el comienzo eh.
Después se pone así todo muy a full, con todo tipo de cacerías, y mas vampiros (porque el resto de la familia de Edgard juró vengarse), y monstruos y mucha acción y efectos especiales, y CGI, y pantalla verde y persecuciones en auto, y giros argumentales, y erotismo, y criaturas mitológicas (que tienen sexo), y suspenso, y desenlaces inesperados y situaciones irresueltas que pueden dar lugar a varias secuelas.

Y cuento hasta ahí nomás porque no quiero adelantar mas nada, pero lo que queda es una cosa de locos.

¿Y? ¿Qué tul? Yo creo que puede andar eh. Para mi es un hit. Un tanque. Algo nunca visto en el cine. Por ahí es demasiado de vanguardia, pero bueno, hay que tomar riesgos.

Es mas, y esto es algo que se me acaba de ocurrir ahora, así de golpe (¡Uh, no paro nunca! jajaja): si la idea anda en el cine, después hasta se podría hacer una adaptación para la televisión y ¡hacerla una serie!.
¡Es genial!

¡Uuuhhhh estoy a full! Me voy ya mismo a ultimar detalles y a esperar el llamado de alguna compañía productora, para ver si negociamos los derechos y empezamos a ver cuando nos vamos para Jolibud (o San Luis, vamos a ver como viene la mano con el presupuesto).